sábado, 2 de octubre de 2010

Yo si fuí

Esta semana ha sido durilla...
La gente estaba dividida, algunos compañeros apoyaban la huelga, otros no.
Hubieron asambleas informativas, donde se explicaba los motivos de la huelga y el porque de hacerla el 29 de septiembre.
Yo para entonces ya lo tenia claro.
Los compañeros que decidieron ir a trabajar argumentaban lo siguiente:

Ya es tarde
No sirve para nada
Los sindicalistas cobran el día, mientras que a nosotros se nos descuenta
Necesito el dinero.
Trabajo por que me sale de los cojones!!!
No creo que sea el momento (esto lo decían los afiliados y simpatizantes del P.P) lo que tenia que hacer era dimitir Zapatero.

No hace falta que os explique como pensaba yo, porque ya lo hice en mi anterior entrada.

Pero como era de esperar me salio la vena sindicalista, que supongo que herede de mi padre y mi padre del suyo, y pensé en ellos, en aquellos trabajadores que lucharon por nuestros derechos y que hoy poco a poco vamos perdiendo. Pensé en mis tiempos de delegada sindical y me puse del lado de esos delegados de a pie, de aquellos que tienen ideales, que creen, que sacrifican un puesto de trabajo mejor dentro de la empresa por defender los derechos de sus compañeros, sin obtener nada a cambio, solo por convicción, pensé en mi, que he hecho muchas huelgas a lo largo de mi vida sindical y jamas he cobrado ninguna, que he estado de piquete informativo y nunca he coaccionado a nadie, pensé que como yo todavía existen compañeros y la prueba la tengo cerca, mi amiga Marisa es delegada sindical en mi empresa, con ella he vivido muchos momentos dificiles y sabéis? Criticar es fácil, decir que todos los sindicalistas son unos sinvergüenzas, que se pegan la vida padre también, pero os aseguro porque lo he vivido, que cuando hay elecciones sindicales y necesitas presentar una candidatura nadie se quiere mojar, nadie quiere presentarse, nadie quiere problemas...
¿No se vive tan bien?
Si eso es así, porque nadie se quiere presentar?.
Pensé en todos ellos, deje por un momento aparte aquellos que como os dije tiene apoltronado sus culos en los despachos y solo me centre en los miles de sindicalistas que son honrados, que son valientes, que tienen principios.
No fui a trabajar.
La mitad de la plantilla si lo hizo, y por lo contrario de lo que se vende en las noticias, en este caso los que se mofaban, se reían, ironizaban en contra de los que se encontraban a las puertas del centro del trabajo manifestándose en contra de la nueva reforma laboral, eran aquellos trabajadores que entraron a la fabrica, fue patético.

Por la tarde acudí a la manifestación, estuve con los compañeros de industria, el sector al que pertenezco y me emociono la cantidad de gente que salimos a la calle, el hablar con gente que no conocía, en trabajadores y trabajadoras que como yo todavía creemos en una sociedad mas justa e igualitaria.

¿Servirá de algo?

No lo sé... lo que si se, es que hice lo que debía, pienso que debemos hacernos oír, que de la misma forma que cuando muere una mujer por violencia domestica, gritamos basta ya, y no sirve de nada porque ya esta muerta, no debemos nunca de quedarnos callados, hay que seguir gritando frente a las injusticias, frente a nuestros derechos, esos derechos fundamentales por los que lucharon nuestros padres y que no conseguiremos dejar a nuestros hijos si no nos mantenemos unidos, si seguimos pensando que todo es una mierda y no hacemos nada para evitarlo.

1 comentario:

  1. Hola: te entiendo y te apoyo. Pero date cuenta que muchos sindicalistas, se han dejado comprar, y la gente se ha desengañado. Los que estan arriba de todo ya no son sindicalistas si no politicos. Yo respeto mucho la huelga, pero creo que los sindicatos, la hicieron tarde.
    Y creo que los Sindicatos, no debian consentir que los manifestantes destrozaran el mobiliario urbano, porque luego mas pobres quedamos, pues esos destrozos los vamos a pagar todos. Ya sabemos que no eres tu ni yo, ni el honrado trabajador, pero ellos lo consienten. Y hay que respetar el derecho y la libertad, de no ir.
    Gracias por el tiempo que fuiste sindicalista y defendiste al obrero, pero hay otros que no son asi. Un saludo

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