Historias de madrugada

Eran las dos y cuarto de la mañana cuando entro por antena la llamada:

Orlanda:-Perdonarme toda la audiencia...intentare no estar nerviosa, pero os pido ayuda, a toda la gente, por favor, a toda la gente. ¡Ayuda!. Soy una madre angustiada que se me ha perdido un niño de educación especial. No sabemos nada de él desde las cuatro de la tarde. Y ya he avisado a la policía, a emergencias, y nadie, nadie, me da ninguna contestación. Por favor el niño es deficiente mental. Es un niño que cuando esta bien es cariñoso, es bueno... No sabe ni el día en que vive, ni el mes en que vive, tiene mucha fantasía de... del metro, le gusta la Renfe... El niño esta tomando una medicación, tiene la cara con marcas... llevaba un anorak amarillo y unos pantalones azules como de chandal... Es un niño muy bueno, aquí toda la gente le quiere, los vecinos, sus hermanos, todos. Yo tengo ocho hijos, mi marido y yo los dos somos ciegos y tenemos un hijo también ingresado en el Doce de Octubre, y hemos ido a verle por la tarde y cuando salimos de ver a su hermano, el niño se ha soltado de la mano de su padre y se ha ido corriendo... ¡Por favor que alguien me ayude! El niño fantasea mucho con viajar, de viajar y del tren y eso... Por favor... soy una madre desesperada, necesito vuestra ayuda.

En casa de Orlanda se escuchaba otra voz que le iba apuntando por detrás. Era otro de sus hijos. Se le oía de fondo:
Voz: - Mama, mama...(mama con acento en la primera a) dile lo de las zapatillas blancas...
Y Orlanda decía:
- El niño lleva unas playeras blancas...
Voz: - Mama y que tiene los dientes mal...dilo
Orlanda: -Y los dientes picados por la medicacion que toma, que es muy fuerte...
Voz: - Mama... a los taxistas y a los camioneros, que se lo digan...
Orlanda. - Taxistas, camioneros, gente de la calle, por favor ayuden a una madre desesperada...

Era sorprendente como se iba dibujando la situación que se estaba viviendo en esa casa.
La madre con el teléfono, el hijo pendiente de que no se le olvidase ningún detalle, el marido en silencio esperando, escuchando la radio en otra habitación. La primera noche sin Marcos.
Cuando quedaban cinco minutos para las noticias de las dos, llamo Pilar...

Pilar:- Llamo porque yo a ese niño que están buscando lo he visto esta tarde en el tren de cercanías. El chico ha montado en la estación de Atocha y ha empezado a decir "¿Este tren va pa´ Leganés? ¿Va pa´ Leganés?" y como empezaba a insistir y así como dando voces ¿no?, pues le hemos dicho. "Sí, sí, este tren va para Leganés". Y el niño a empezado a decir. "Es que a mi me gusta mucho viajar, me gusta mucho viajar". Y se veía que no era normal, que era retrasado, y yo he pensado. "Pobrecillo, parece perdido". Y llevaba unos pantalones azules y un anorak amarillo..., si y con la cara como picada, como con marcas... Y fíjate si me ha llamado la atención que cuando he vuelto a casa se lo he comentado a mi hijo, que había visto en el tren a un chico que parecía perdido, y yo estaba acostada cuando a debido de llamar la madre, y ha sido mi hijo el que a venido a despertarme y me ha dicho: "Mamá, que el niño ese que has visto le están buscando por la radio".

Cuando escuchamos el testimonio de Pilar se nos erizo la piel. No solo había una persona que había visto al chico, sino que su hijo se había tomado la molestia de despertarla para que llamara al programa porque estaban buscando al chaval.
A las dos y cuarto entro una tercera llamada en relación a los que oyentes ya llamaban "el chico del metro". Era un operario que había estado arreglando las escaleras mecánicas de diferentes estaciones.

Operario:- Quería comentar... sobre el chico este que están buscando... Bueno pues nosotros le hemos visto entre las doce y media y la una de la madrugada en el metro, en la estación de Alonso Martinez. Nos ha llamado la atención porque unos extranjeros se estaban metiendo con él y les hemos dicho: "Oye, dejad en paz al chaval, ¿no veis que no esta bien?". A continuación hemos ido a la estación de Chueca y luego, entre la una y las dos menos veinte, el compañero mio le ha visto pasar por la plaza y se iba a la calle Fuencarral.

Era alucinante. Empezaron a llegar correos electrónicos a la dirección del programa de oyentes que deseaban suerte a Orlanda, gente de otras ciudades que estaba siguiendo la pista del chico a través de la radio, dos de aquellos correos decían así:

"¡Hola gente del Hablar! Somos un grupo de arbitros de Leganés que acaba de terminar de entrenar. Vamos a coger los coches y a salir a buscar al chico, por si anduviera por aquí por la zona".

"Somos una asociación de vecinos de Chueca; hemos oído que el chaval puede estar aquí por el barrio, así que vamos a bajar unos cuantos por si acaso le vemos".

Un grupo de arbitros que debían de estar agotados después del entrenamiento y que, en vez de irse a casa se van con los coches a buscar a un chico que se había perdido. Unos vecinos que a las dos de la mañana se visten y salen de su casa para recorrer el barrio...impresionante.
A las tres menos cuarto llamo Carlos:

Carlos:- Sobre el tema del chaval, este que estaba perdido, que esta aqui conmigo. Que venia a trabajar con el coche escuchando la radio, que yo trabajo en un bar aquí en Chueca, y cuando he salido del coche he visto al chico que iba andando con otro por la calle, y le he llamado, y me le he traído aquí conmigo al bar. Pues eso, que no le pasa nada, que esta tomándose una coca-cola con unas patatas fritas, y que ya he llamado a la policía y que ahora vienen para acá. Tranquilizar a la familia y decirle que esta bien, que esta aquí con nosotros.
Locutora de radio:- Carlos, ¿Le puedes decir a Marcos que se ponga?
Carlos:- Espera...
Locutora:- Hola Marcos te llamo de la radio ¿que tal estas?
Marcos:- Bien, aquí... Estoy... estoy en un bar... tomando coca-cola y comiendo patatas...
Locutora:- ¿Y te están tratando bien?
Marcos:- Si, maravilloso... (se ríe)
Locutora:- Creo que has estado toda la noche viajando en el tren ¿no? En el metro... porque a ti te gusta mucho viajar...
Marcos:- Sí, aunque estoy un poco cansado de tanto viaje (se ríe otra vez con esa risa nerviosa de no saber muy bien lo que esta pasando)

Se despidieron de Marcos y la centralita y el correo electrónico se les colapsaron de oyentes que querían celebrar el que se hubiese encontrado al chaval. Recibieron textos muy bonitos; casi todos hablaban de la soliradidad, de volver a creer en el ser humano.
A las cuatro menos cuarto volvio a llamar Orlanda, con otro tono, con otra voz... se deshacia en halagos. Se puso muy solemne y dijo: "Ante todo a toda la audiencia, a los arbritos, a los vecinos, a los del metro, a toda la audiencia ...GRACIAS (si la hubiesemos podido ver, seguro que Orlanda hablaba con una mano en el corazón y la cabeza inclinada, en un gesto de humildad y agradecimiento). Sois maravillosos os quiero. Gracias". Luego deseo para todos lo mejor del mundo, hablo de Dios y del Espiritu Santo, dijo que nos tendria en sus oraciones... "España, hermanos... ¡Gracias, en serio, gracias!". Por detras, se volvia a escuchar la voz de su hijo mayor:
- "Mama, mama...y a la SER, y a ellas, que son muy guapas, mama"

Aquella noche montaron una pequeña fiesta en la radio despues del programa. Como era finales de noviembre, alguien adelantandose a la navidad, les habia regalado una botella de cava que abrieron a las cuatro de la madrugada para brindar por Marcos y por todo lo que habia pasado. Por la noche en la radio son cuatro gatos, pero reunieron a todos sus compañeros de informativos, a las señoras de la limpieza, a los tecnicos...Seguro que durante muchisimo tiempo, si alguien les preguntaba por algun caso especial, contarian este...

Y yo... aquella noche llore, rei, me emocione y me di cuenta de que en contra de lo que la mayoria pensamos, hay mas gente de la creemos, que merece la pena.