Se levanto temprano, ultimamente dormía mas bien poco...
Al estar de vacaciones tenia todo el tiempo del mundo,es curioso como el día parece tener el doble de horas cuando se esta de vacaciones, hay tiempo para todo, sin mirar el reloj, sin prisas para nada...
Como siempre se preparo un café y encendió el ordenador, le gustaba leer mientras desayunaba.
Mas tarde recogió la casa y preparo el bolso de la playa
- Que suerte vivir cerca de la costa... - pensó
Diez minutos mas tarde ya estaba tumbada a la orilla del mediterraneo. La playa que frecuentaba estaba poco concurrida, no era turística, por lo que todavía conservaba ese encanto de las playas vírgenes, sin duchas, sin chiringuitos, sin tumbonas.
Era un día caluroso, así que sin dudarlo se zambullo en las aguas tranquilas, nado un buen rato hasta quedar extenuada, salio del agua para volverse a tumbar. Aquella sensacion de su piel mojada secándose al sol, era una de las cosas que le producían mas placer, en esos momentos cerraba los ojos y se dejaba llevar por sus pensamientos....
Una vez mas, llego él a sus pensamientos.
Habían pasado nueve años desde que se conocieron, siete desde que ella se separo y él todavía no había sacado a lady first de su vida.
Hay veces que las cosas son fáciles, otras no tanto y otras muchas las complicamos nosotros.
Él llevaba una vida poco convencional cuando le conoció, no estaba casado, pero si compartia su vida desde hacia muchos años con una mujer.
Dos años después de separarse ella, intento dejar su relación él.
Y en ese punto fué donde comenzo todo.
Crisis personales... "hay que esperar"
Crisis económicas... "hay que seguir esperando"
Mas crisis personales... "solo un tiempo mas"
Una enfermedad de ella... "ahora es imposible"
La enfermedad y muerte del padre de ella... "un poco mas de tiempo"
Entre crisis y crisis hablaron del tema. Él estaba convencido que pronto todo se solucionaría, ella le creía, sabia que él no mentía, que estaba convencido de ello, o mas bien deseaba que fuera así, pero en cada una de aquellas conversaciones ella sabia y así se lo hacia saber que no seria como él pensaba, que lady first no se iría, si él no la echaba, pero él no tenia valor para hacerlo.
Ella a menudo le argumentaba que en la vida siempre pasan cosas, que siempre esta girando, pero que cuando alguien desea algo y lo desea por encima de todo, tiene que coger el toro por los cuernos, nunca se puede esperar a que las cosas se solucionen solas.
Hacia casi un año, que aparentemente todo estaba bien, él en repetidas ocasiones le había dicho a lady first que cuando se iba a marchar y ella siempre le contestaba lo mismo "estoy en ello", la casa era de él, por lo que era lady first quien debía de marcharse y acomodarse en el apartamento que utilizaba como estudio de trabajo, pero nunca llegaba el momento...
En este ultimo año, diez meses concretamente, habían habido un montón de conversaciones, conversaciones que no llevaban a ninguna parte, todo seguía igual.
Lady first, seguía con un pie dentro.
Él condicionado por la situación
Y ella cansada... cansada de sacar el tema, cansada de animale a normalizar la situación, cansada de escuchar siempre lo mismo, cansada de que nadie en la vida de él conociera su existencia.... cansada y decepcionada. Si mas bien en estos momentos estaba decepcionada, era tanto lo que había apostado, era tanto lo que había luchado que ya no tenia fuerzas para seguir haciéndolo...
Ahora en estos momentos y después de nueve años, analizando cada una de las situaciones, cada una de las conversaciones, cada uno de los momentos... ya todo le daba igual, ya le estaba bien este tipo de relación, verse una vez cada mes o cada dos meses y una semanita en vacaciones, eso si, hablar por teléfono todos los días.
Muchas veces se había preguntado porque?
Muchas otras se habia angustiado, había llorado, se había enfadado, no lo entendía, nunca lo entendió, solo lo asumió.
Ahora mirando el mar... ese mar mediterraneo que tanto le gustaba, sonrió con sus pensamientos y en voz alta se dijo:
- Ya da igual.
En realidad no da igual, aunque sepa que él no miente, la sensación es entre pérdida de tiempo y tomadura de pelo. Pero mirar el mar ayuda mucho, y sonreir también.
ResponderEliminarHOla: precioso relato. Que aproveche la vida y a otro, que la sepa valorar. La vida pasa en un soplo. El esta cómodo con las dos. Aunque también hay mucha lista, que sabe como manejar algún tonto, y le da vueltas y vueltas. Pero 10 años son muchos.
ResponderEliminarElla, cuántas historias conocemos todos parecidas a la que relatas, con ese final "ya da igual..." Conozco mujeres que han dicho hasta aquí aguanto y se han largado a vivir otra vida independiente de la que llevaban con sus parejas. Sois mucho más valientes que los hombres. O más sinceras. El hombre suele poner excusas para dar ese paso, lo describes muy bien, somos más egoistas, o más miedosos, o yo qué sé qué. Y al final muchos de ellos quedan amargados el resto de sus vidas por no haberse atrevido a tomar la decisión de separarse. En fin, ellos se lo pierden...
ResponderEliminarHola Ella, me cierro mi blog definitivamente, y mi mail, en mi blog, lo explico.
ResponderEliminarSi algun dia vuelvo con otro blog, os lo comunico, pero de momento no.
Gracias por todo. Buena suerte.